Cargo en mis hombros el mundo de más de una persona
y esperan que tome decisiones que se ajusten a sus conveniencias.
Porque lo que importa es el tiempo que ellos ganan
y no el tiempo que me hacen perder.
Disculpa si tropiezo con cada piedra,
pero no soy yo quien las pone en el camino.
Disculpa si te pregunto mil veces lo mismo,
pero o soy yo el que no te entiende o tú no sabes explicar.
Disculpa si no encontraste en mí lo que buscabas,
eres libre de seguir tu rumbo.
Pero no me pidas que sea otra persona,
no me pidas cosas que no puedo cumplir,
no me pidas que cumpla con expectativas que son tuyas.
Si mi barco se hunde,
vaciaré la cubierta con mis manos hasta tocar puerto.
Si mi castillo de naipes se cae con tu brisa,
pues levantaré una muralla alrededor para que no lo toques.
Si la ventana se cierra frente a mis narices,
partiré el vidrio con los puños y saldré por el otro lado.
Porque no puedes cambiar mi futuro,
no puedes torcer mis decisiones,
no puedes lograr que me arrepienta,
ni destruir lo que he logrado hasta ahora con mi sudor y lágrimas.
Volveré.
Me haré más fuerte,
más inteligente,
más astuto,
y superaré cada obstáculo
para que el día de mañana,
el sueño que quiero lograr se haga realidad.
2 comentarios:
Increíble es un honor leer esto...
increible tu fuerza de voluntad! asi se enfrenta los obstáculos que pone la vida!! muy lindo lo q escribiste! beso!
Publicar un comentario